La ortodoncia es una especialidad dentro de la odontología que se encarga del estudio, prevención, diagnóstico y tratamiento de las anomalías de forma, posición, relación y función de las estructuras dentales.

Tiene como objetivo diagnosticar, prevenir y tratar las posibles alteraciones y mantenerlas en buen estado de salud de manera armónica mediante el uso y control de fuerzas.

 

Principales tipos de ortodoncia:

1.- Ortodoncia interceptiva.

Se realiza en niños durante la dentición temporal (“de leche”) o mixta.

Está indicado para corregir las alteraciones incipientes de mal-oclusión (contacto irregular de los dientes superiores con los inferiores)

Es principalmente, una ortodoncia preventiva orientada a impedir que se establezca y desarrolle algún tipo de mal-oclusión.

Tiene como objetivo contribuir de manera positiva al desarrollo de una dentición permanente armoniosa, funcional y estética.

Así como la erradicación hábitos nocivos como:

  • Succión del pulgar.
  • Morderse las uñas.
  • Chupete.
  • Succión del labio inferior.
  • Lactancia artificial.
  • Respiración bucal.
  • Reeducación de hábitos.
  • Expansión del paladar.
  • Ausencias dentales.

Por este motivo es de vital importancia realizar una revisión a edades tempranas entre los 4-6 años, o al menos no más tarde de los 7-8 años.

2.- Ortodoncia correctiva.

Se realiza cuando es necesario corregir algún tipo de mal-oclusión ya establecida. Se realiza en edad juvenil y adulta para resolver posibles mal-oclusiones, la morfología y estética facial.

Existen varios tipos de ortodoncia correctiva con aparatos removibles o fijos:

Aparatos removibles.

Son los que se puede quitar y poner el propio paciente.

Se basan en aplicar presiones controladas sobre los dientes que se deseen desplazar, para ello se utilizan algunos elementos metálicos como:

  • Resortes.
  • Arcos.
  • Tornillos.

Están indicados para la expansión de los maxilares, corregir mordidas cruzadas y apiñamientos leves. Tienen ventajas, pero también limitaciones. No son una alternativa a la ortodoncia fija.

3.- Aparatos fijos.

Brackets. Son los más conocidos y utilizados.

La ortodoncia fija consta de varios elementos: bandas, brackets, tubos ligaduras y arcos las cuales una vez colocados en las piezas dentarias transmiten las fuerzas necesarias para producir los movimientos deseados.

Indicaciones:

  • Malposiciones.
  • Dientes rotados.
  • Cerrar espacios dentarios.
  • Mala oclusión.

Tipos de brackets:

  • Brackets metálicos.

Los más convencionales y los primeros en salir al mercado.

  • Brackets zafiro.

Son transparentes, cristalinos. La única parte de metal es el arco. Son de máxima estética e igual de eficaces que los metálicos.

  • Brackets de porcelana.

Fueros los primeros brackets estéticos en salir al mercado. De color blanco opaco parecidos a los dientes.

  • Brackets linguales o incognito.

Son los que van colocados en la parte interna de los dientes. Están hechos de manera personalizada para cada paciente.

  • Brackets de autoligado o sistema Diamond.

Son los brackets que permiten realizar movimientos más rápidos por esto nos puede ahorrar tiempo en el tratamiento y permiten crear más espacios para alinear los dientes por lo que a veces no es necesario realizar exodoncias.

Al mismo tiempo no es necesario utilizar ligaduras (que suelen ser metálicas o de goma, nos sirven para “ligar” el arco metálico al bracket) con lo que aparecen menos llagas y roceduras en la boca durante el tratamiento.

4.- Ortodoncia invisible. Invisalign.

Es el tratamiento de ortodoncia que consiste en un sistema de alineadores transparentes realizados de manera individualizada para cada paciente.

Este tipo de ortodoncia tiene múltiples ventajas:

  • Pasan totalmente desapercibidos.
  • Son cómodos.
  • Permite retirarlos por el paciente para su limpieza.
  • Se retiran para comer.
  • Se cambian cada dos semanas.
  • Muy higiénicos.
  • Fácil cepillado.
  • Poder practicar deportes de contacto.
  • Mantener una estética y ritmo de vida que requieren pacientes con mucha vida social o de reuniones y viajes constantes.
  • No interfiere en la rutina diaria.
  • Menos problemas con llagas y rozaduras.